Perú vuelve a las calles contra el gobierno de Boluarte y el Congreso

Foto: Movilización en Perú el 28 de julio, día de las Fiestas Patrias. (Susanna de Guio)

Este 28 de julio, fecha de celebración de las Fiestas Patrias en Perú, se cargó de fuertes expectativas a raíz de las convocatorias nacionales para protestar en contra del Gobierno de Dina Boluarte.

La actual mandataria, encargada por el Congreso después del fallido autogolpe del presidente Pedro Castillo el pasado 7 de diciembre, dio un discurso a la Nación de más de tres horas, mientras en la capital la policía nacional empezaba a reprimir a los manifestantes reunidos para pedir su renuncia.

La Defensoría del Pueblo registró seis heridos, pero en las redes sociales se acumularon durante toda la jornada las denuncias de los atropellos de la policía: heridas de perdigones, golpes injustificados y detenciones arbitrarias, incluso por parte de policías vestidos de civiles, y un uso desproporcionado de gases lacrimógenos contra manifestantes pacíficos en distintas ocasiones durante la movilización en Lima, denunciado por la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos. Se registraron disparos directos al cuerpo de los protestantes, hubo ataques a la delegación de la región de Puno, hostigamiento y golpes a por lo menos siete periodistas y fotógrafos en Lima, a quienes se les exigió identificarse como colegiados, pedido que constituye censura según establecido por la Corte Interamericana de Derechos Humanos hace casi 40 años. 

La Defensoría del Pueblo registró seis heridos, pero en las redes sociales se acumularon durante toda la jornada las denuncias de los atropellos de la policía: heridas de perdigones, golpes injustificados y detenciones arbitrarias

Las señales de que la represión y el amedrentamiento son la única respuesta de las instituciones estatales a las protestas se venían repitiendo ya en los últimos días: un caso emblemático ha sido la detención del joven estudiante Oscar Bellido, durante la marcha del pasado 22 de julio en Lima, con la acusación del delito de disturbios. Fue dejado en libertad recién el 27, después de numerosas irregularidades, por falta de medios probatorios y por las contradicciones entre las versiones de Policía y Fiscalía.

Las movilizaciones en contra del Gobierno de Dina Boluarte y el Congreso se realizaron en todo el país. En Ayacucho las marchas sumaron el rechazo a la mandataria y también al gobernador regional Wilfredo Oscorima. En Arequipa los manifestantes trataron de interrumpir el desfile civico militar de las Fiesta Patrias. En Juliaca la parada fue adelantada al día 26 e intervenida por los familiares de las víctimas de la masacre del 9 de enero, que reclaman respeto por el duelo que vive la ciudad. “No hay nada que celebrar” es la consigna que se sumó al pedido de renuncia de Boluarte.

Además de las movilizaciones en las distintas provincias de Cusco, en la antigua capital incaica un contingente policial desmesurado rodeó los manifestantes en la plaza Tupac Amaru, donde era prevista la concentración con un efecto intimidatorio que los participantes solo han experimentado bajo este gobierno. En la ciudad de Puno se reunieron miles de manifestantes de las provincias rurales quechua y aymara, cientos de comuneros de Acora se apostaron en las carreteras y en el departamento hubo once bloqueos de rutas de los 14 registrados a nivel nacional. Los puentes Internacional y Colonial, en Ilave, fueron cerrados en los días anteriores al 28, el distrito de Atuncolla se había manifestado en Puno ya una primera vez el día 24 junto con su ronda campesina y el sindicato docente en preparación de las movilizaciones nacionales y para el 28 bloqueó el camino hacia Juliaca. 

“La región de Puno está de duelo, por esto saldremos a la calle el 28”, ha anunciado Yolanda Crisisto, expresidenta del distrito de Acora, preparandose para ir a Lima con una delegación aymara. “Desde las comunidades tenemos muchos reclamos, en el campo los problemas se están agudizando con el cambio climático y no hay ayuda estatal, además desde Lima nos estigmatizan. Nosotros queremos defender nuestra patria, pero no a este gobierno que es ilegitimo”, agrega Yolanda. “Ya no se respeta la autonomía de las instituciones, la fiscal está a favor de Dina Boluarte y del Congreso, dicen democracia pero esto no lo es, estamos luchando por el estado de derecho, aquí matan y se violan los derechos humanos”.

“Ya no se respeta la autonomía de las instituciones, la fiscal está a favor de Dina Boluarte y del Congreso, dicen democracia pero esto no lo es, estamos luchando por el estado de derecho, aquí matan y se violan los derechos humanos”

A su vez, la lideresa Angela Chislla declaró a Noticias Ser: “Como mujeres nos sentimos indignadas, en la región Puno no reconocemos a la señora Dina como presidenta, ella no nos representa, no es presidenta, por la forma y actitud como llegó al cargo. Ella debía de pensar en el pueblo y no lo ha hecho, se hizo la que no entiende la realidad que vivimos en el país, y por esto seguimos en pie de lucha”.

Desde Puno, las comunidades aimara anunciaron que seguirán su huelga en los próximos días, rechazando el mensaje que la mandataria entregó a la Nación en la mañana del 28 de julio.

Efectivamente, en el largo discurso oficial de Dina Boluarte, no se pudieron rastrear respuestas a los pedidos que la sociedad civil está reclamando desde su asunción. Si bien pidió perdón “en nombre del Estado, a los deudos de todos los fallecidos, civiles, policías y militares y también los heridos” en las protestas de inicio de este año, su gesto está llegando tarde y queda vacío ya que no estuvo acompañado del anuncio de nuevas elecciones —el principal pedido de las manifestaciones— ni del reconocimiento de las responsabilidades políticas personales y de su gabinete por los excesos de la represión que provocó la muerte de casi setenta personas en los primeros meses de su gestión. 

El adelanto de elecciones fue planteado al Congreso a principio de año en tres ocasiones y fue rechazado por los parlamentarios, determinados a quedarse hasta el 2026, al igual que la presidenta, que en ningún momento consideró renunciar al cargo, a pesar de la escasa legitimidad que tiene actualmente su gobierno.

Boluarte propuso un pacto de reconciliación sin hablar de justicia, y acto seguido pasó a lamentar las pérdidas económicas dejadas por las protestas, que según su lectura habrían sido “una grave convulsión social cuyo objeto, ahora sin duda alguna, fue derrocar al nuevo Gobierno y reemplazar nuestra democracia por una dictadura”. Tildó al Gobierno de Castillo como incapaz y corrupto olvidando que ella fue parte relevante de ese ejecutivo. Además, criticó que se hayan organizado nuevas manifestaciones en estos días, sin rescatar ni siquiera el mensaje del arzobispo de Lima, Carlos Castillo, que durante la misa y Te Deum por el 202 aniversario de la independencia del Perú afirmó: “Parece que no se dieran cuenta que nuestro pueblo existe, sufre y demanda cambios urgentes” e hizo referencia a las muertes que esperan aún justicia y reparación”. El arzobispo hizo referencia a las encuestas, que “detectan la más grave separación y distanciamiento entre las capas dirigenciales, sobre todo las políticas, y la vida del pueblo sencillo y sus graves sufrimientos y demandas” y exhortó a ensanchar la participación y la democracia en vez de restringirla.

Que se haga justicia es el reclamo más sentido del ciclo de movilizaciones que empezó el pasado 19 de julio, junto con la renuncia de Dina Boluarte, el cierre del Congreso y el llamado a una Asamblea Constituyente

Que se haga justicia es el reclamo más sentido del ciclo de movilizaciones que empezó el pasado 19 de julio, junto con la renuncia de Dina Boluarte, el cierre del Congreso —que llevaría a nuevas elecciones— y con el llamado a una Asamblea Constituyente.

“Vamos a buscar justicia, queremos que los asesinos, los responsables de toda esta masacre no estén en el poder, porque estando en el poder lo único que van a buscar es la impunidad” explicó a El Salto Raúl Samillán, presidente de la Asociación de Familiares de Mártires y Víctimas del 9 de enero, que viajó de Juliaca a Lima para manifestarse el 28 de julio. Es hermano de Marco Antonio Samillán, medico de 30 años que el 9 de enero pasado fue al aeropuerto de Juliaca para atender a la cantidad de heridos que ya había a principio de la tarde. “Lo único que él quería era que no se pierdan vidas, pero lamentablemente lo mataron, le dispararon por la espalda cuando él atendía a un muchacho. Yo quisiera saber quién es la persona que le quitó la vida a mi hermano, incluso me atrevería a preguntarle por qué lo ha hecho” cuenta Raúl. Hay que exigir que se juzguen a los responsables ahora, insiste, para que los familiares no terminen sus vidas sin alcanzar a obtener justicia para sus seres queridos, para que no toque a los hijos continuar lo que empezaron.

Ya pasaron casi siete meses de la masacre de Juliaca, donde fueron asesinadas 18 personas, y todavía no hay ningún efectivo policial indagado. “Esto nos preocupa porqué nosotros identificamos la cadena de mando y recabamos todas las pericias” afirma Wilmer Quiroz, uno de los abogados que sigue las causas judiciales de la Asociación, “pero vemos que no hay una voluntad de parte de la Fiscalía de querer investigar a la policía, al contrario de lo que ocurrió con las personas detenidas por disturbios ese mismo 9 de enero, donde ya se han formalizado los agravios.” 

Además, el recorrido para abrir las investigaciones ha sido lleno de obstáculos. “Primero este caso lo toma la Fiscalía de Crimen Organizado, que está solamente encargada de verificar la participación de  organizaciones criminales, más no de fallecidos por parte de agentes estatales”, sigue el abogado Quiroz. Cuando llegó a la Fiscalía de la Nación ya habían pasado dos meses. Con la Asociación fueron a Lima para pedir a la Defensoría del Pueblo la creación de una Fiscalía de Derechos Humanos. “Los 18 fallecidos y los más de 250 heridos que se han registrado aquí en Juliaca precisaban de una investigación especializada, esto no es un hecho común que se presenta todos los días, aquí el Estado ha vulnerado derechos fundamentales, han asesinado y heridos a ciudadanos con armas de guerra, la intención no fue dispersar a los manifestantes porque las heridas son en la cabeza, en el pecho, estas se llaman ejecuciones extrajudiciales”.

Ya pasaron casi siete meses de la masacre de Juliaca, donde fueron asesinadas 18 personas, y todavía no hay ningún efectivo policial indagado

La investigación se abrió en marzo con la nueva Fiscalía de Derechos Humanos en Juliaca, pero después el caso fue derivado a Lima: “Eso dificulta mucho a que las víctimas podamos aportar nuestras pruebas de manera directa, participar presencialmente en las declaraciones de la Fiscalía de la Nación, o de los efectivos de la Policía Nacional” sigue Quiroz, “además hace pocos días los fiscales a cargo del equipo especial fueron removidos, se han nombrado otros que estarán recién tomando conocimiento de los hechos, lo cual también representa una dilación”.

La responsable de extraer las investigaciones de los lugares donde ocurrieron las violaciones de los derechos humanos es la Fiscal General Patricia Benavides, quien además a mitad de julio abrió una investigación contra tres miembros de la Junta Nacional de Justicia. Se trata del órgano que vigila los magistrados y elige los presidente de dos de los tres organismos electorales. Es también el colegiado que está investigando la misma fiscal desde 2002 por tres distintas razones vinculadas a conflictos de interés y vínculos con una red de corrupción. 

Según el ex fiscal supremo Avelino Guillén, entrevistado por Público, el fujimorismo estaría tratando con estas medidas de consolidar su poder y controlar las próximas elecciones. Guillén es el juez que logró condenar Alberto Fujimori por crímenes de lesa humanidad y afirma que “es una copia exacta de lo que ocurrió en el año 2000, para que el acto electoral sea un mero trámite de un resultado que aseguran tener desde antes”.

Nada nuevo se vislumbra en la clase política al poder, mientras el poder ejecutivo y legislativo avanzan en el copamiento de las instituciones estatales en la completa indiferencia de lo que en las calles del Perú se grita cada vez con más fuerza

Recién el pasado 24 de julio el Tribunal Constitucional declaró inconstitucional la investigación que el Congreso llevó adelante en contra del presidente del Jurado Nacional de Elecciones, José Luis Salas Arenas por los supuestos fraudes electorales del 2021. Sin embargo, el titular de la entidad electoral ha manifestado que el riesgo de un juicio político en su contra queda abierto, ya que al Parlamento se le reconoció la potestad de investigar y procesar a los miembros del JNE.

Por último, el pasado 27 de julio se votó la nueva mesa directiva del Congreso para el año 2023-2024, con un pacto llamado “fujicerronista” entre el partido de derecha Fuerza Popular y Perú Libre, liderado por Vladimir Cerrón. Nada nuevo se vislumbra en la clase política al poder, mientras el poder ejecutivo y legislativo avanzan en el copamiento de las instituciones estatales en la completa indiferencia de lo que en las calles del Perú se grita cada vez con más fuerza.

Este material se comparte con autorización de El Salto

 

Fuente: Desinformemonos

Juego de hipócritas

A partir de ese momento, el sistema institucional corrupto guatemalteco, que tiene como su único e imprescindible objetivo la defensa de un estatus quo que garantiza los intereses de las clases dominantes y los poderes fácticos del país, comenzó a calentar motores.

Primero fue el juez Fredy Orellana que, a petición del Ministerio Público, ordenó la suspensión provisional de la personería jurídica del Movimiento Semilla, por el supuesto delito de falsificación de firmas en la conformación del partido.

Una acción totalmente ilegal, ya que la legislación electoral guatemalteca prohíbe suspender a un partido después de la convocatoria a una elección y hasta que ésta se haya celebrado.

Luego, y a pesar de que el Tribunal Supremo Electoral pidiera dejar sin efecto la decisión del juez y que la Corte de Constitucionalidad declarara con lugar dicho amparo, garantizando así la realización de la segunda vuelta, el Ministerio Público siguió imperturbable su plan de hostigamiento.

Durante toda la semana pasada, agentes de la Feci allanaron la sede del Registro de Ciudadanos del TSE, secuestrando registros y supuestas evidencias del delito.

Hicieron lo mismo en la sede del Movimiento Semilla, al tiempo que fueron emitidas varias denuncias y órdenes de captura.

En medio de una situación cada vez más vergonzosa, los magistrados electorales volvieron a presentar un recurso de amparo en contra de autoridades que podrían amenazar el desarrollo del balotaje el próximo 20 de agosto.

Esta vez, la Corte de Constitucionalidad desestimó el amparo, aduciendo que ya con la resolución del 12 de julio se garantizaba el desarrollo de la nueva cita electoral.

Detrás de este “juego de hipócritas”, donde cada actor actúa según un diseño bien definido y escrito por las élites criollas y los grupos económicos, está la clara intención de deshacerse de un candidato incomodo que, de manera inesperada, alteró el escenario que había sido tan cuidadosamente preparado.Reacciones

Ante este escenario, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) expresó su preocupación por las “injerencias en el proceso electoral, en un contexto de falta de independencia del Ministerio Público y su fiscal general”.

También urgió al Estado a “asegurar el principio de separación de poderes” y a “garantizar el derecho a la participación política”.

El secretario general de Naciones Unidas, António Guterrez, a través de un comunicado, llamó al Estado de Guatemala a respetar la voluntad popular y los derechos humanos.

Declaraciones expresando profunda preocupación por lo que está ocurriendo en Guatemala fueron emitidas también por las diferentes misiones internacionales de observación electoral, acreditadas en el país.

Mientras tanto, la jornada del 23 de julio fue caracterizada por nuevas movilizaciones de protesta que se están multiplicando en varios puntos del territorio nacional.

En la capital se desarrolló la Marcha de las Flores, donde cientos de personas exigieron la renuncia de la fiscal general, Consuelo Porras, del jefe de la Feci, Rafael Curruchiche y del juez Fredy Orellana, por su interferencia en el proceso electoral y por obstaculizar la realización del balotaje.

Por: Giorgio Trucchi

Foto: Gerardo Iglesias

Tomado de: rel-uita.org

La aprobación de la ley de carbono-colonialismo y la falta de consulta a los pueblos indígenas en Honduras

El pasado 26 de julio fue aprobada por el Congreso Nacional de Honduras, la Ley Especial de las Transacciones de Carbono para la justicia climática, sin haber sido consultada con los pueblos indígenas en Honduras, desconociendo una vez más el derecho a la consulta previa, libre e informada (CPLI); consignado en convenios y declaratorias, ratificados por el Estado hondureño.

Los bonos de carbono forman parte esencial del programa para reducción de las emisiones de la deforestación y la degradación de bosques (REDD por sus siglas en inglés) surgido en la COP13 efectuada en Bali en diciembre del 2007. Desde el nicio los pueblos indígenas señalamos las posibles consecuencias, entre ellas los despojos territoriales y desalojos, que se han venido dando en los últimos 16 años.

Los desalojos de los pueblos Sengwer y Ogiek en Kenia, es una muestra de los deplorables desatinos instigados por el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques (FCPF, por sus siglas en inglés) y ONUREDD, los cuales junto al gobierno de Kenia, desconocieron los derechos territoriales y culturales de los pueblos indígenas; en especial el derecho a la consulta previa, libre e informada.

Existe una larga lista de ejemplos de los desmanes cometidos por los proyectos REDD, tanto en Africa como América  Latina, en nombre de una supuesta conservación, la que permite a las empresas contaminantes pagar, para continuar con sus aportaciones de gases contaminantes, y los estados nación proceder a proteger los bosque que se encuentran en peligro de desaparición.

La narrativa de conservación que promueven los organismos internacionales y estados nacionales se ha convertido en una enorme farsa, que paulatinamente viene saliendo a flote. Las grandes empresas verificadoras encargadas de las transacciones de los bonos de carbono, han sido señaladas pos sus inciertas practicas que colocan al descubierto un enorme fraude; mientras la contaminación continúa de forma insostenible.

Las falsas soluciones al cambio climático, no han sido más que un pretexto para evitar asumir el fin del uso de combustibles fósiles, y lograr efectuar los cambios requeridos para frenar la destrucción de la naturaleza.

Los casos de las verificadoras Verra y South Pole, demuestran la mala fe existente por parte de los organismo internacionales; mientras los pueblos indígenas hemos sido objeto de engaños y despojos a manos de los denominados cowboys del carbono.

El estado de Honduras, el 22 de junio del 2022, de forma muy prudente decreto una moratoria sobre los fondos de carbono. En un breve comunicado conjunto entre el Instituto de Conservación Forestal (ICF) y la Secretaria de Recursos Naturales (SERNA) hacen alarde de la suspensión que aducen es “Con el objetivo de evitar la colonización del comercio del carbono de nuestros bosques”. 

En diciembre del año pasado, en el Congreso Nacional, circulaba un anteproyecto de Ley REDD, que en ningún momento fue consultado con los pueblos indígenas. La Ley que fue aprobada en días recientes, no hace ninguna mención sobre los pueblos indígenas y mucho menos de salvaguardas, desconociendo de esta forma las Salvaguardas de Cancún, adoptadas en el 2010, en el marco de la COP16.

Dichas salvaguardas son enfáticas en cuanto “la participación plena y efectiva de las partes interesadas relevantes, en particular los pueblos indígenas y las comunidades locales”. El estado de Honduras tiene una larga y sórdida trayectoria en desconocer los derechos de los pueblos indígenas, que se agravó durante la narco dictadura; y todo parece indicar continua sucediendo con la actual administración gubernamental.

El CPLI es uno de los pilares esenciales de los derechos colectivos que poseemos los pueblos indígenas. No obstante haber sido condenado en dos casos ante la Corte Interamericana de Derechos, por la violación al derecho a la consulta en las comunidades de Triunfo de la Cruz y Punta Piedra, 8 años de haber sido emitidas las sentencias, no existen indicios que el Estado se apegue a su cumplimiento.

La larga lista de las violaciones al CPLI continua creciendo. El caso de la Ley recién aprobada que de forma cínica incluye la mención de “justicia climática”, entra en contradicción con las negociaciones a puertas cerradas para la explotación petrolera en la plataforma marítima de Moskitia. Por un lado el Estado pretende salvar los bosques tropicales mientras al mismo tiempo algunas millas mar adentro permitirá la exploración petrolera.

Las buenas intenciones que puedan tener los organismos internacionales y quizás algunos funcionarios locales, naufragarán en medio de la inexistencia de un estado de derecho. El desconocimiento del CPLI manifestado por el gobierno del “socialismo democrático” no es más que el continuismo de las políticas de despojo que se han venido dando desde hace siglos.

Desde la OFRANEH, rechazamos categóricamente la aprobación y puesta en practica de la Ley Especial de las Transacciones de Carbono para la justicia climática, aprobada por este gobierno, sin ninguna consulta con nuestros pueblos y al mismo tiempo que se estan impulsando proyectos para el despojo de nuestros territorios.

La Ceiba, Atlantida, Honduras C.A

Organización Fraternal Negra Hondureña, OFRANEH

Jachal exige Justicia

A 8 años del derrame de cianuro en la Mina Veladero,

Jachal No Se Toca llega a la Ciudad de Buenos Aires para pedir justicia. 

Integrantes de la asamblea socioambiental Jachal No se Toca, de San Juan, estarán este lunes 31 de julio, en la Ciudad de Buenos Aires, para presentar un petitorio firmado por 71 mil ciudadanxs de todo el mundo para exigir que se realice de una vez por todas el juicio oral y público por el derrame de cianuro en la mina Veladero en 2015. Esta mañana lo presentaron en los tribunales de Comodoro Py, y habían solicitado reunirse con el Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié.

Desde Diálogo 2000, sumamos nuestro apoyo e invitamos a acompañarles a las 18hs en el Museo del Hambre, para recibir a la delegación de Jachal e informarnos acerca de su lucha y cómo apoyarles.

La Asamblea Jachal No se Toca, de San Juan, nos invita a conocer más de la situación que resume de la siguiente manera:

“Como en gran parte del país- estamos atravesando las consecuencias del

modelo extractivista que arrasa con nuestros ríos y nuestros territorios.

“Por un lado, la Mina Veladero (de la empresa canadiense Barrick Gold y la china Shandong Gold) ha cometido varias violaciones a diferentes leyes; ha derramado cianuro y mercurio en nuestro río en reiteradas ocasiones, está violando la Ley de Glaciares, está violando la ley de Medio Ambiente -destruyendo un montón de lugares dentro de una reserva de la biosfera-, y está violando la Ley de Residuos Peligrosos acumulando mercurio. Es una mina ilegal que sigue reventando nuestra cordillera impunemente.

“Por irregularidades como las mencionadas cometidas por la misma empresa Barrick Gold, el Gobierno chilena ha cerrado otro proyecto minero llamado Pascua Lama del lado chileno. Sin embargo, inexplicablemente, del lado argentino sigue abierto.

“En San Juan tenemos, además, otros proyectos como Josemaría (minería de cobre), también violatorio de varias leyes, como la Ley de Glaciares y de Medio Ambiente, que también ha sido observado por su impacto en las napas subterráneas que en ese lugar están a menos de un metro de profundidad, como así también por el riesgo sísmico –sobre todo por la presencia de un dique de colas colosal que pone en riesgo a toda la región a perpetuidad-. 

“’El Ministerio de Ambiente tendría que impedir que se lleve adelante este proyecto porque debería ser el brazo ejecutor de las leyes de cuidado ambiental y ya debería haber actuado. Cabandié ya está terminando su gestión y no vimos ningún gesto, a pesar de su historia y sus discursos’, indicó Domingo Jofré de la Asamblea Jachal No Se Toca.

“Y continuó: ‘Pero así como tenemos al Gobierno nacional y a los gobiernos provinciales que no hacen nada, existen en todo el país un montón de compañeras y compañeros que, además de resistir y construir en sus territorios, apoyan nuestra lucha y esperamos encontrarnos en Buenos Aires’.

El Juicio Oral que no llega

“El 12 y 13 de septiembre de 2015 se produjo un derrame de un millón setenta y dos mil litros de solución cianurada en la mina Veladero (San Juan), incluso hay sospechas de que la cifra es mucho más alta.

“Tras idas y vueltas, en mayo de 2016 la Corte Suprema de la Nación dividió la competencia y definió que la Justicia sanjuanina debía juzgar a los responsables provinciales y de la empresa, mientras que la federal debía investigar la actuación de los funcionarios nacionales.

“En el plano federal, el juez Sebastián Casanello dispuso -en octubre de 2018- elevar a juicio oral (causa 10049/15) a Sergio Lorusso (ex secretario de Ambiente), Beatriz Domingorena (ex subsecretaria de Control y Fiscalización Ambiental y Prevención de la Contaminación) y Jorge Mayoral (ex secretario de Minería) por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público.

“En junio de 2018, Casanello ya había elevado a juicio oral a Lorusso junto a otros exsecretarios de Medio Ambiente, Juan José Mussi y Omar Judis, y a Ricardo Villaba (extitular de IANIGLA) por el delito de abuso de autoridad en relación a la Ley de Glaciares en una causa desprendida de la del derrame.

“En esta causa la justicia federal aceptó a la asamblea de Jachal como querellante, contrató un perito internacional que constató los daños. Al día de hoy, y a más de cinco años de esas elevaciones, no hay fecha de inicio del juicio oral y público contra estos cinco funcionarios.

“Un dato no menor es que, desde entonces, nuestra comunidad ha sido víctima de otros cuatro derrames más.

“En este contexto, la Asamblea Jachal No Se Toca junto a las organizaciones Ekō,

Earthworks y MiningWatch Canada impulsamos una petición que juntó 71 mil firmas de todo el mundo para exigir a la Justicia argentina que juzgue, de una vez por todas, a los responsables de este de derrame que se ha calificado como “el peor desastre ambiental minero de la Argentina”.

La Asamblea

“La Asamblea Jachal No se Toca surgió en Febrero de 2015 para oponerse a la extracción de uranio que amenazaba la región. Unos meses después, a partir del derrame de septiembre del mismo año en la mina Veladero, que contaminó nuestro río, instalamos un carpa en la plaza principal.

“Desde entonces sostenemos este espacio que es de resistencia pero también de encuentro con la comunidad.”

¡Sumate! Lunes 31 de julio

18:00 – Encuentro en el Museo del Hambre (Avenida San Juan 2491) 

Proyección del corto “El Nacimiento del Agua” y conversatorio con integrantes de la Asamblea Jachal No se Toca; Carolina Caliva, Beatriz Páez, Guillermo Folguera, Darío Aranda, Enrique Viale y Silvia Medrano.

Contactos de Prensa: 2644770999 Jachalnosetoca.com

 

Fuente: Dialogo2000

¡No al Capitalismo Verde! Exigimos Soluciones Reales para la Madre Tierra y la Autonomía Indígena.

La aprobación a la “𝑳𝒆𝒚 𝑬𝒔𝒑𝒆𝒄𝒊𝒂𝒍 𝒅𝒆 𝒍𝒂𝒔 𝑻𝒓𝒂𝒏𝒔𝒂𝒄𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒅𝒆 𝑪𝒂𝒓𝒃𝒐𝒏𝒐 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒍𝒂 𝑱𝒖𝒔𝒕𝒊𝒄𝒊𝒂 𝑪𝒍𝒊𝒎𝒂́𝒕𝒊𝒄𝒂” es una falsa solución ambiental que permite que las grandes empresas del mundo sigan contaminando a cambio de compra de bonos de carbono. 

Esta ley responde a la política internacional del mercado de carbono y de los “pagos por servicios ambientales” que violentan la autonomía de las comunidades indígenas, interviniendo en las formas de manejo del bosque de los pueblos y además comercializando la producción del oxígeno. 

Desde COPINH nos pronunciamos en contra de este tipo de proyectos que violenta la gobernanza indígena y que propicia la intervención de empresas e instituciones en los bosques ancestralmente resguardados por los pueblos originarios. 

Recalcamos que la aprobación de esta ley ha seguido la práctica histórica del Congreso Nacional de hacerlo sin consulta con las comunidades indígenas que vamos a ser epicentro de la mercantilización de nuestros bosques y es lamentable como continúa esta nefasto protocolo que niega la participación de las comunidades que sufrimos las consecuencias de estas acciones.

Los pueblos indígenas no podemos seguir cargando las consecuencias de una contaminación producida por el gran capital. ¡Los que contaminan deben hacerse cargo de las consecuencias ambientales que están generando!

El Estado hondureño debe buscar reales soluciones a las contaminación y daño a la madre tierra que vaya en consonancia con los derechos de los pueblos indígenas del país. Una gran acción sería liberar los ríos y montañas de la explotación de ilegales empresas hidroeléctricas y mineras perjudiciales a los pueblos y a la naturaleza.

¡Exigimos el respeto a la gobernada ancestral y a las decisiones de comunidades! ¡Sí a las reales soluciones para la protección de la madre tierra!

“Mientras tengamos capitalismo este planeta no se va a salvar, porque el capitalismo es contrario a la vida, a la ecología, al ser humano, a las mujeres”

Berta Cáceres

#NoAlCapitalismoVerde #SíALaVida #AutonomíaIndígena #RealesSolucionesAmbientales #MadreTierra #Ecología #EcologíaPolítica

 

Fuente: COPINH

ARTIGO: Os olhos carregam a dor do descaso

Rua da comunidade de Boiçucanga, em São Sebastião, ainda com muitas marcas da tragédia crime de fevereiro. Foto: Flaviana Serafim

Por Rosilene Wansetto*

A dor que salta aos olhos das mulheres e crianças é imensurável. Os pés cansados seguem conduzindo centenas de famílias e milhares de pessoas na busca por seus direitos, direito a vida. As mãos trêmulas carregam a água escadaria acima para preparar o pouco alimento disponível. O coração cheio de dores por tudo que viveram há seis meses e pelo que ainda vivem. O descaso segue profundo e não é só de agora, de seis meses, o descaso vem de antes. A Mãe Terra havia dado outros sinais, mas a ganância e o descaso falaram mais alto silenciando os sinais.

No próximo dia 19 de agosto completam-se seis meses da tragédia crime no Litoral Norte de São Paulo, no município de São Sebastião. Em Missão de denúncia e solidariedade, o que pudemos presenciar dialogando com centenas de famílias que seguem totalmente abandonadas pelo poder público local, estadual e federal, foi o enorme descaso, desrespeito e racismo ambiental e estrutural cometido contra essas famílias.

As dezenas de famílias, áreas, morros, comunidades que foram atingidas com as fortes chuvas seguem sem providências. O entulho — árvores que foram arrastadas, pedras que rolaram, carros amaçados como papel, casas destruídas —tudo segue igual ao dia da tragédia. As famílias sem ter para onde ir depois dos dias passados da tragédia voltam para suas casas e seguem em risco.

Muitas vidas foram perdidas devido aos soterramentos e as vidas que sobreviveram seguem com tanta dor e traumas que caminham com dificuldade de seguir em frente. O medo da próxima chuva é visível. O trauma pós tragédia as acompanha marcando o corpo, o psicológico e o coração sem nenhuma assistência.

As moradias já precárias que sofreram com a chuva seguem ocupadas por seus moradores com riscos ainda maiores. É nítido o descaso, mas é ainda mais evidente o racismo ambiental praticado contra essas mulheres, crianças, idosos, e dezenas de comunidades, são em sua maioria pessoas negras, caiçaras, indígenas. É visível o descaso com as pessoas, famílias e pessoas que vivem do lado do morro. Do outro lado da rodovia onde vivem as famílias ricas e que exploram a mão de obra das pessoas que vivem nas comunidades dos morros demonstra o que falamos sobre racismo ambiental. De um lado da rodovia já tem praticamente toda a infraestrutura recuperada, do outro nem os entulhos foram removidos, a lama secou e continua lá, as pedras que rolaram seguem no mesmo lugar, as casas a ponto de cair com seus moradores dentro. Do lado da burguesia branca a recuperação já está em curso. Onde vive a população pobre atingida tudo segue igual ao dia da tragédia, sem reconstrução, só paliativos.

Essas famílias não têm transporte adequado, o acesso à escola para as crianças é negado ou quando oferecido está em estado precário. O acesso à saúde e atendimento assistencial é negligenciado. O direito à alimentação e a água potável é precário. As pessoas dessas áreas não são vistas como sujeitos de direitos. São vistas como massa de manobra para os interesses de alguns poucos detentores de poderes político na região e que defendem a especulação imobiliária. A tragédia ambiental era previsível, porém a vontade política e a prioridade do poder público de construir casas adequadas para essas centenas de famílias nunca foi prioridade.

O descaso sentido e vivido por essas centenas de famílias causa uma dor profunda. Não é possível mensurar os gritos silenciados. Por outro lado, o que vimos e sentimos foi uma coragem que vem desses gritos e dessas mulheres. Sim, em sua maioria são mulheres que fazem a luta acontecer. “A dor nos move para fazer a nossa voz ser ouvida, nada sem nós”, essa foi uma das frases que mais escutei durante a Missão. Nenhuma decisão deve ser tomada pelo poder público sem a comunidade. Porém, isso não tem acontecido de fato. As famílias atingidas não têm tido o direito de participar das decisões, não estão sendo consultadas sobre as casas que estão sendo construídas, se desejam morar naquele local destinado pelos gestores públicos.

Os moradores dessas comunidades exigem do poder público transparência na aplicação dos recursos públicos destinados para a reconstrução dessas áreas impactadas. Dinheiro que, ao que parece, já desapareceu e nada foi feito ou quase nada. Onde estão sendo aplicados e em quais condições? Quanto de recursos públicos foram repassados pelo governo federal, estadual, por doações, onde estão os recursos? Outra demanda das comunidades é sobre o plano de proteção de emergências e contenção das encostas, dos morros. O que está sendo planejado? Pois até agora nas encostas onde essas centenas de famílias vivem nada foi feito, segue como no dia da tragédia crime. O direito à moradia/habitação de qualidade segue sem solução, algumas ações paliativas, mas que não dá nenhuma segurança futura. O descaso com a saúde, educação, transporte, alimentação, água, trabalho… são inúmeros os problemas que seguem sem nenhuma solução plausível. O que presenciamos foram os direitos humanos sendo violados em toda a sua amplitude. Racismo ambiental é tudo isso somado ao privilégio branco e à xenofobia. Os crimes são inúmeros com as pessoas atingidas.

Outra demanda das comunidades é um basta à perseguição das lideranças. Lutar não é crime. Lutar e reivindicar direitos é um direito. Basta de criminalização. Basta de ameaças para as comunidades e lideranças.

A dor do outro precisa ser sentida por todos nós e nos mover, criar sinergia, luta, sororidade. Que a coragem que vi nos olhos e corpos daquelas mulheres nos motivem a seguir de pé e em luta por elas e por nós. Que nossos pés sigam o mesmo compasso das batidas do coração dessas mulheres que carregam o desejo de que seus direitos sejam respeitados e garantidos. Há uma dívida social e ambiental imensurável nesta região. Sigamos na luta por Justiça Socioecológica.

*Rosilene Wansetto é secretaria executiva da Rede Jubileu Sul Brasil e participou da Missão-Denúncia e Solidariedade de 24 a 26 de julho no Litoral Norte e Baixada Santista (SP).

 

Fuente: Jubileu Sul Brasil